Las sorpresas no han acabado aquí, ya que cuando la Misión excavó en una gran villa fortificada de época bizantina y árabe, no muy lejos del Osireion, se encontraron numerosos bloques de piedra reutilizados con decoración de tipo copto, pero que ostentan también en el dorso fragmentos de inscripciones y relieves similares a los procedentes del Per-jef. Así pues, es probable que la superestructura del Per-jef ya comenzara a ser desmantelada en época bizantina.

Esta gran villa fortificada tiene una serie de dependencias relacionadas con el culto cristiano, lo que hace pensar que, en algún momento, se convirtió en un monasterio de monjes, de los muchos que se erigieron alrededor de Oxirrinco durante la época copta. En todo caso, este recinto estuvo ocupado hasta después de la conquista árabe, ya que se ha encontrado una inscripción árabe del siglo VII, así como una lápida sepulcral con una inscripción de la era del emperador Diocleciano, en la que consta una fecha también de finales del siglo VII.

Cerca de esta villa o monasterio, situado al noroeste de la ciudad, hemos localizado también un eremitorio con importantes inscripciones coptas, un tesorillo de más de 600 monedas de los siglos IV y V, un altar votivo, de hacia el siglo I a. C., que podría estar relacionado con el camino terrestre que de la ciudad llevaba hacia el norte, así como una necrópolis de pájaros y una cantera subterránea. El resto del terreno, entre la muralla oeste y el Osireion, está ocupado por una extensa necrópolis de época griega y romana.