La ciudad grecorromana de Oxirrinco era una ciudad amurallada. Se puede seguir bastante bien el trazado de la muralla, que era de adobe, por el lado oeste, que da al desierto. Aunque en los lados norte y sur el trazado se ha perdido, se puede adivinar bastante bien hasta dónde llegaba la ciudad. En el lado este, el elemento más destacable es una puerta monumental de piedra, de aspecto faraónico, que da al actual pueblo de El-Bahnasa y al Bahr Yussef. La extensión de la ciudad era de unos 2 km en sentido norte-sur y de 1,5 km en sentido este-oeste. La población estimada debía de ser de unos 30.000 habitantes.
En la época romana, cuando la ciudad alcanzó su máxima extensión, estaba formada por una serie de barrios situados a lo largo de la muralla y estructurado en torno a una gran necrópolis central, que hemos llamado Necrópolis Alta, en el centro de la cual se levantaba un gran templo, posiblemente dedicado a Serapis, y frente a él, un gran mercado. La ciudad tenía un gran eje viario norte-sur, la calle mayor, y dos ejes viarios transversales, la calle ancha del norte y la calle ancha del sur. La calle ancha del norte conectaba el mercado y el templo de la Necrópolis Alta con la calle mayor, y la calle ancha del sur conectaba el teatro con el Bahr Yussef, pasando por el tetrápilo de Tueris y la puerta monumental este. Alrededor del tetrápilo se extendía, probablemente, el casco antiguo de la población de época faraónica, y al sur había unas termas.

Vista aérea de la muralla
Fuera del recinto amurallado de la ciudad, al oeste, hay un Osireion del cual se ha conservado la parte subterránea y que data esencialmente de tiempos ptolemaicos. Entre el Osireion y la ciudad hay una necrópolis griega y romana.
En la época cristiano-bizantina, extramuros de la ciudad se fueron construyendo numerosos monasterios, tanto de monjes como de monjas. Esta información, que nos ha llegado a través de un texto anónimo griego contemporáneo, ha sido confirmada por los hallazgos de nuestras propias excavaciones: la gran villa fortificada al noroeste de la ciudad y el oratorio copto que hay cerca. También ha sido confirmada por las excavaciones de urgencia del Consejo Superior de Antigüedades al sur de la ciudad, con el descubrimiento de los restos de otro monasterio.